;

Autor Tema: Artículo 219 de la LOPJ.  (Leído 2626 veces)

0 Usuarios y 1 Visitante están viendo este tema.

Desconectado manquepierda78

  • Gran usuario
  • ****
  • Mensajes: 664
  • Registro: 15/03/11
Artículo 219 de la LOPJ.
« en: 08 de Noviembre de 2011, 15:53:36 pm »
Conde-Pumpido se abstiene de intervenir en la causa sobre Blanco por ser su amigo.

El fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido acaba de firmar un decreto por el que anuncia que no intenvendrá en ninguno de los trámites, dictámines o traslados que pueda hacerle el Tribunal Supremo en relación con la implicación del ministro de Fomento, José Blanco, en la 'operación Campeón'.

Conde-Pumpido admite ser amigo personal de Blanco, por lo que considera que incurre en una de las causas de abstención previstas en la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ) y, en concreto, en la de mantener amistad con una de las partes implicadas.

El artículo 219 de la LOPJ, que contempla como motivo de abstención del fiscal y, en su caso, de recusación la "amistad íntima o enemistad manifiesta con cualquiera de las partes".

No puedes ver los enlaces. Register or Login

Y digo yo, si un fiscal general del Estado es tan amigo de un ministro del gobierno, ¿por qué, en aras de la transparencia y de ese artículo 219, no rehusó en su momento ser Fiscal General para que hubiese ganado la independencia y el no estar al servicio del gobierno de turno? Distintas varas para interpretar la amistad y el art. 219: juzgar a mi amigo, no; ostentar el cargo, sí.

¡Conde-Pumpido, esbirro!

No puedes ver los enlaces. Register or Login

Desconectado simple22

  • Licenciados
  • *
  • Mensajes: 14754
  • Registro: 14/09/08
  • En la playa cesa el oleaje.
    • www.uned-derecho.com
Re:Artículo 219 de la LOPJ.
« Respuesta #1 en: 08 de Noviembre de 2011, 16:11:38 pm »
No se puede hacer nada en estos casos, por eso el sistema está absolutamente deslegitimado.

Hago notar que tanto IU, como PSOE pretendieron hacer de los Fiscales, jueces o semijueces, por no decir dioses o semidioses.

Retórica obrerista y populista, claro: ¡algo tienen que vender y mejor eso a pegarse un tiro! ¿No? Pero a la hora de la verdad a los que perjudican son a los trabajadores y al pueblo. Sólo les importa ellos mismos.
La madurez, el talento y la sabiduría no tienen ni edad, ni sexo, ni jerarquía.