Una vez más no vas por dónde yo voy. No se trata de dar o quitar razones, se trata de aprender de otros, de escuchar, por eso estoy aquí, aprendiendo de otros y de mí misma.
En cuanto a Zara, te puse por ejemplo cómo las ideas de una persona se pueden llevar a cabo con ciertos ingredientes importantísimos y que precisamente es el tesoro que muchos buscan y no encuentran. Y yo admiro a todas aquellas personas que han conseguido la fórmula.
Te diré lo que es suerte: Mi calle, unas aceras anchas, 3 cafeterías cada una con su pequeña terraza de 3, 4 o 5 mesas cada una; dos de esas cafeterías se gastan una pasta en acondicionar el local y trabajar bastante duro para conseguir clientes; son la cafetería b y c; la cafetería A, tiene a varias personas al cargo y todos pertenecientes al clan familiar; no está renovada desde sabe dios cuándo, tienen los más bien pocos clientes de siempre, los vecinos, y cuando te sientas en la terraza aprovechando el sol, esperas media hora a que te sirvan, eso cuando apenas tienen gente dentro...al final decides que, o entras tú a por la bebida o nada de nada. Bien..Viene el Ayuntamiento y anchea las aceras quedando éstas en superaceras; pues bien, a la cafetería A, la de los perezosos, empieza a crecerles el ambiente; mientras, ellos siguen en la misma pereza, pero van viendo que cada semana han de ampliar una mesa más en la terraza; hoy, si cualquier día te vienes por aquí, te mostraré como está la terracita de los osos perezosos. Nota: las cafeterías b y c también han ampliado mesas en la terraza, pero ellos tienen el terreno limitado; a la cafetería A, por contra, le ha quedado una explanada imponente.
Por otra parte, me gustaría que me hablaras de los sueldos de Zara.