Hace un año estaba igual que vosotros/as... con el miedo a una semana cargada de exámenes, con la zozobra de no saber que iba a pasar, con las dudas de última hora, con la ilusión de que todo saliese bien, con las ojeras de las noches de dormir poco, con la esperanza de que el tiempo sacrificado en el verano sirviese para algo, y el remordimiento de que quizá pudiese haber arañado unas horas más...
Ahora, un año después, todo eso no es para mí más que un inolvidable recuerdo del camino que me llevó a la licenciatura, y a vosotros/as os pasará igual... muy pronto estaréis sentados en la otra orilla del río.
¡Mucha suerte a todos/as en los exámenes!, ¡ánimo!