Lo que hizo Franco. Y además, anteponer el patriotismo al individualismo. Pues como dejara sentado Pericles, al que le va bien en lo suyo, si la ciudad está en decadencia, la decadencia de la ciudad, arrastrará al individuo. Mientras que si a alguien le va mal en lo suyo y a la ciudad le va bien, tiene grandes posibilidades de enderezar ese mal rumbo.
No debemos dejarnos embaucar por un materialismo de cortas miras y de corto recorrido, en contra de lo que dicen Rajoy, el psoe y mucho antes, el abyecto Marx, la economía no lo es todo. Y ya en lo estrictamente material: ¿no veis cómo nos luce el pelo en lo material, por suprimir el interés nacional, en aras del económico? Pues ahí lo tenemos: ni prosperamos como nación, ni por tanto como individuos.