Siento indignación por lo que está aconteciendo, anoche apenas pude conciliar el sueño pensando en esas pobres personas que no tienen quien los defienda, quien de la cara por ellos. Todos esos que vilmente les bombardean son cobardes y malvados y les espera un duro castigo divino, no creo en la presunta justicia universal ni en los tratados sobre derechos humanos...
Hipocresía, manipulación, codicia, racismo, injusticia y sangre son la tónica de este mundo corrompido