Yerras, Palangana: la antigua normalidad es inaceptable, porque nos ha llevado a esto. Más vale que leas el libro de Emilio Carrillo, porque todavía no te enteras del todo de qué va la película. Había previamente:
1. Una sociedad depresiva, que lo hacía todo con prisas y mal.
2. Necesitaban mucho y mucho, lo mucho que necesitaban.
3. Había un desequilibrio ecológico insostenible, que es necesario corregir.
4. Había unas industrias tóxicas que engordaban sus arcas, a costa de parasitarnos: farmacéuticas, petroleras, financieras, alimenticias-basura, tecnológicas, medios de comunicación, etc. Sobre todo estos últimos, especialmente tóxicos.
6. Hipertrofia estatal, atrofia en el uso de los derechos constitucionales, ruina económica, etc.
7. Miedo a la muerte, y a la vida, horror vacui, etc.
8. Un paradigma sanitario basado en un modelo errado y desfasado: la medicina alopática, que a su vez se basaba en una sociedad que psicológicamente estaba entre la enfermedad y la convalecencia, pero no así en la salud.
9. El más complejo e importante de todos: un mundo basado en que la economía, la materia y la técnica lo son todo, basado en las falsas seguridades. Todo eso que fue necesario para el progreso triunfal de la quinta raza, ahora ya se vuelve inviable en la sexta raza. Por eso no hay que volver, es imposible volver a la normalidad de la quinta raza. A la antigua de la sociedad distópica y a la nueva, de la sociedad irrespirable. Será necesaria una normalidad más y mejor evolucionada, de la sexta raza. La de la quinta, es inviable.
10. Pero, lo más doloroso de todo: el paso de la quinta a la sexta raza será, está siendo inicialmente un horror. El horror no es tanto cambiar, como el paripé de querer cambiar, para seguir esencialmente en lo mismo. Habrá una limpieza general. Unos sacrificios en términos de vidas humanas, como nunca ha habido y nunca volverá a haber.