Mientras la caza no sea ilegal, cosa que incluso me llegaría a parecer bien, porque estoy en contra de deportes sanguinarios y el maltrato de los animales, mientras la caza no sea ilegal, repito, Garzón tiene todo el derecho del mundo a hacer lo que le dé la gana y con quién le dé la gana en su tiempo libre.
Ciertamente, hay un dicho que dice que "la mujer del César no sólo debe ser honrada sino parecerlo". Tal dicho incluye una implicación de que la presunción de inocencia no existe.
En cuanto a la división de poderes, dudo mucho que el Ministro de Justicia le dé instrucciones a Garzón de cómo tiene que hacer las cosas. Si Garzón ha recibido, por vía de reparto, un caso, no tiene más remedio que seguirlo.
Lo sorprendente de este asunto es la actitud del PP. Ha hecho dimitir al alcalde de Boadilla, y han destituido al Consejero de Deportes de la CAM. Si lo han hecho es porque se lo han tomado muy en serio. O sea, que hay datos reales que sugieren la veracidad de lo que se ha publicado.
Las investigaciones de la Fiscalía han concluído que no ha habido filtraciones, que los datos publicados se derivan de la propia denuncia en su momento presentada, que se sabe que el denunciante es o era militante del PP -incluso en el PP hay personas demócratas, nótese bien-, y que un denunciante tiene todo el derecho del mundo a entregar la documentación que quiera a los periódicos que quiera.
Conclusión. Los hechos son los hechos, y queremos saber la verdad. Cuando Garzón termine su instrucción, veremos en qué queda todo.
Otra cosa es lo que pretende el PP: sustraerse a un principio legal muy conocido, a saber, evitar el Juez predeterminado por la Ley.