Está claro que pueden, no sólo porque lo hacen, sino porque nadie lo prohíbe y a estas alturas nadie ya lo va a prohibir.
Si ya Astarloa decía en los comentarios de Alzaga que se podía si estaba en el Estatuto, si eso era lo que se pensaba en 1998, es obvio que en estos tiempos actuales, hay un clima mucho más favorable a ello. No olvidemos tampoco que los Estatutos pasan por las Cortes, si éstas deciden enajenarse potestades legislativas, serán soberanas igualmente para enajenarse dichas potestades.
Mirad: la Constitución se hizo en plan de pantomima histriónica, no hay modo de que funcione, Alzaga ya habla de la relatividad de la misma. No es en rigor una norma jurídica para el pueblo, es una carta de buenas palabras que lo que hace es blindar a una casta que vive del negocio del autobombo histriónico de qiue esto funciona, pero no es así. Luego los políticos y sus mayordomos de la toga hacen lo que les da la gana, de modo que lo interpretan a su capricho y conveniencia.
Y luego está el asunto de que los que hicieron el documento, nos hacen creer que dejan la vida pública, pero ni mucho menos. Ahí continúan los Astarloa, Trillo, Peces Barba, Félix Pons, Miquel Roca, etc. El único que se retiró de verdad y a Méjico, fue Felipe. Ahí siguen ordeñando la vaca que son los Presupuestos del Estado. Lo demás les da igual. Hoy en la Universidad, mañana en la Administración, luego en los Tribunales, luego dirigiendo cursos de postgrados y, finalmente, con contratos cautivos de libros oficiales de la escuela, ya sea de la ESO o de la Universidad, etc.