La maniobra de recusación de Garzón no es sino parte de un teatro previamente amañado, para intentar ocultar torpemente el pacto al que han llegado Garzón y el Supremo. Una jugada burda, que lamentablemente los medios independientes no han visto, pero que si se analiza fríamente, no puede tener otra interpretación. A este circo, también se ha sumado Villarejo para disimular la realidad. Y la realidad es la que les cuento: mutila los escritos de las acusaciones para que no aparezcan las pruebas y después lo absuelven por "falta de pruebas."
Pero en realidad, lo que pasa es que las pruebas las ha quitado Varela, así que Garzón será absuelto de forma fraudulenta, porque Varela ha robado las pruebas a las partes acusadoras.
En cuanto a la querella contra Varela, para que los incautos de los medios independientes sigan picando en el anzuelo, la archivarán echándoles la bronca delante de las cámaras por la falta de respeto al Supremo y en términos muy duros, pero cuando los focos se apaguen, los querellantes contra Varela, el propio juez, el PSOE, Garzón y el Tribunal Supremo se darán apretujones, abrazos, celebrando todos juntos sus fechorías por las cuales quedarán impunes.
Desgraciadamente, los medios independientes están haciendo el canelo, creyéndose este enfrentamiento impostado "de cara a la galería", defendiendo a ese "juez" corrupto, que no es sino un politicastro más del comisariado político del PSOE en la judicatura. Espero que los medios lean la carta que les he escrito y despierten, porque la verdad es la que yo cuento, por enrevesada y dura que pueda parecer.