Yo después de la segunda semana de exámenes, me autoimpuse otra sabática, hasta el 1 de marzo.
Desde entonces, estoy haciendo algo, aunque todavía debo reconocer que no he cogido el ritmo adecuado, pero vamos ya me voy metiendo en el ajo.
Lo que si es cierto, y ahí estoy con Raúl es que las notas hacen falta ya. No se si nos motivará o nos desmotivará, pero la incertidumbre no es buena.
En mi caso, las quiero para planificar septiembre debidamente por si hubiera fallado en esta convocatoria pensar en coger vacaciones en días previos para estudiar...
Un saludo.