Veamos:
1. Yo creo que no se puede decir que no valgan para nada: siempre la presión vale para algo, y cuando no vale, es porque no se ha metido la suficiente presión, de manera que en tal caso, vale para seguir metiendo presión.
2. Creo que la unidad de las víctimas no es tan importante, como que cada cual siga el camino que cree. Yo creo que el camino correcto es siempre, meter presión. Si son muchos mejor, si somos muchos los que acompañamos, mejor, pero el camino correcto repito, es siempre, meter presión.
3. Yo creo que sí que son mayoría, si sumamos a Alcaraz y a la gente de Ángeles Domínguez, la de la asociación 11-M y otros no asociados que son también partidarios de meter presión.
4. No creo que la lucha decidida contra el crimen y el colaboracionismo, hoy socialista, siempre nacionalista y mañana quién sabe si popular, sea nada ideológico: sino de temperamento tibio o enérgico, decente o indecente. Yo creo que hay que seguir el camino enérgico y el camino decente, es decir: combatir el crimen y el colaboracionismo de los antiespañoles de todos los partidos. Creo que las víctimas y todos los que les seguimos, vamos a estar contra todo tipo de apaño con el nacionalismo antiespañol y con el terrorismo antiespañol. Hay que seguir ahí: hoy con Zapatero, porque las indignidades, las traiciones y la complicidad con el terrorismo han sido obra del PSOE de Zapatero. Y mañana: si Rajoy toma el mismo camino, pues habrá que decirle a Rajoy que por ahí no.