El tiempo ha demostrado que la Audiencia Nacional es el pozo negro de la judicatura, que ha sido contaminado por el poder político. Y en la medida en que el poder político simpatiza abiertamente con los terroristas, veo que lo de Troitiño se debió a las componendas políticas del Gobierno con ETA. Ahora bien, en este caso, tiene razón el PSOE en el sentido de que la única responsabilidad patente e inmediata, es la de los prevaricadores que lo han liberado. Entre ellos, por cierto, el prevaricador Ruiz Polanco, que por cierto: ¿cómo es que volvió?