Que por grave que en otros tiempos pudiera ser casos como Faisán, 11-M, conferencia, PP, PSOE, son términos que evocan un pasado en el que creíamos que había democracia. Pero que todo eso fue superado ampliamente por el golpe de Estado de 26 de enero de 2011 entre PP, PSOE y nacionalistas. Nada tiene sentido, hablamos de las opciones de los partidos, pero fijémonos en nosotros mismos: ¿qué opciones tenemos nosotros mismos?
Entonces, si no tenemos ninguna opción más, por ley, que votar a los que ya están que son todos la misma basura, ¿qué sentido tiene hablar de política?