
, si supongo que debe de ser difícil, pero bueno, eso era en la primeras acciones, que cada uno tenía que decir "yo prometo que no le debo", y el otro, ¡yo prometo que me lo debe!, así hasta que al final quien metía la "pata" en la respuesta, se llevaba el gato al agua,

Eso fue en tiempo de Cayo, pero después, el procedimiento fue introduciendo sus premisas y sus conclusiones, con lo cual, en ocasiones, se llegaba a buen puerto,
Creo que el problema radicaba en que prácticamente los contratos o acuerdos eran todos verbales, y no se redactaba un pergamino, al menos, no entre particulares, jejjeje, en eso ahorraban un montón en papel,

A partir de ahora, hasta la hora de las brujas, buen estudioooooooooooooooooo