Pues para mi si, para mi quien disfruta con los fracasos de España y no se alegra de sus exitos, es antiespañol.
Exito hubiera sido que la delegación española hubiera sido un ejemplo delante del mundo, éxito hubiera sido una delegación mínima y no de 180 personas, éxito hubiera sido una delegación acorde con la situación del país, éxito es que las intervenciones y en especial la de la Bottle hubiera dejado boquiabiertos a los presentes, éxito es que en lugar de gastar 8000 mill en los intentos de quitarnos la inferioridad delante de Barcelona, Zaragoza y Sevilla se hubieran invertido en que nuestros licenciados no tengan que emigrar y ser una potencia europea.
Fracaso es el que tiene el país que basó su economía en el ladrillo y el pelotazo, fracaso es que nuestra juventud no tenga futuro, fracaso es que tengamos que emigrar para encontrar trabajo, fracaso es un país que no domina una segunda lengua, fracaso es mantener una alcaldesa con más de 200 asesores puestos a dedo que cuestan más de 10 mill anuales, fracaso es la imagen que dió que parecía que hablaba a disminuidos psíquicos, fracaso es querer imponer cómo éxito la corrupción.
Quien con todo eso cree que es un éxito lo que tiene el país, es antiespañol