Pues eso, que estoy hasta las narices, de
¡Que lo que haya acordado el Sr. Montoro es el pagar -si se paga, mi ayuntamiento no tiene liquidez- sólo el 40 por ciento de esa paga que constituía la norma mínima que no se podía empeorar, sólo por el Estado; ahora devuelven una limosna.
¡Hasta las narices! de que para llegar al déficit todo recaiga sobre quiénes menos ingresos tienen, sin individualizar nada, sin tener nada en consideración.
¡Hasta las narices! De esta estructura políticas que los españoles no podemos mantener con nuestros impuestos, máxime cuando la proporcionalidad del impuesto recae en la parte débil.
¡Hasta las narices! De que no sólo en periodos preelectorales se contraten a los vecinos del municipio, sino que yendo más allá, para que no fuese in crescendo el índice de paro, convirtiesen a los ayuntamientos en empresas de empleo, sin tener en cuenta la sobrecarga de empleados para cubrir un servicio público, mientras dejaban de pagar a la seguridad social y a hacienda.
¡Hasta las narices! De que no se pongan los medios suficientes para inspeccionar la cantidad de economía sumergida -hablo de Andalucía, y de mi municipio sobre todo, no he ido más allá- que muchos españoles, aprovechando la coyuntura política que abrió nuestra querida democracia, realizan una y otra vez, cobran prestaciones, trabajan sin darse de alta; empresarios que realizan contratos a media jornada, empresarios que no quieren dar de alta a los trabajadores, que se lo dice así, ¡tan ricamente!,
¡Hasta las narices de cualquier tipo de casta política! y de la ciudadanía que se le asemeja.
¡Hasta las narices! de privarme de lo poco que podría aportar con mis pobres pagas extraordinarias, y de las muchas horas encerrada en un estudio, por si la cosa cambia, por si la cosa cambia, y algunas veces me pregunto, pero de veras,
¿Cuándo puñetas va a cambiar esto? ¿Quién está por la labor? ¿Quién pone el esfuerzo?
La ya hundida clase media no alta; sólo y únicamente nosotros, quieren que volvamos a la pobreza, de la clase media no alta, a la baja, pero tan baja, que ¡jolines!
¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ Déjennos respirar, casta política y españoles aprovechados, todos incluidos, no se escapa nadie !!!!!!!!!!!!!!!!!!