No se merecen ni una perra chica de lo que ganan.
Y el sistema está contaminado desde las alturas, por lo tanto, los políticos de base son y serán culpables de la podredumbre, mientras no se rebelen contra este estado de cosas.
La imagen que España tiene de los políticos es la de unos, a los que el partido les dice blanco, aprietan el botón de blanco, si dicen negro, negro. No están ahí para servirnos, sino para servirse. No han enriquecido con conceptos (que no tienen) el debate político, ni han aportado ideas luminosas que alumbren el porvenir y sirvan de modelo para otros políticos de España y del mundo, no han aportado más ideas que las imposiciones que les venían dadas desde arriba, ni les ha importado nunca el pueblo, al cual nunca han querido convencer, sino vencer y engañarlo mediante la demagogia e imponerles su manera de pensar. Han carecido siempre de voluntad, sus jefes pensaban y piensan por ellos, no tienen más ideas que las del jefe, limpiar las botas del jefe, hacer la pelota al jefe, etc. Nunca han sido políticos, sino criados del cacique. Y todo eso por un sueldo que no se merecen. En el Parlamento todos sabemos qué van a votar, porque las ideas ya no se discuten: sino que se acatan las órdenes del jefe. Igualmente podemos predecir muchas decisiones judiciales, en función de los partidos que proponen y nombran al juez, no hay lugar para la improvisación, no hay lugar para la sorpresa. Vencer a toda costa, por encima de los derechos humanos, por encima de la dignidad: de la suya y lo que es peor, de la nuestra. Todas las noches es 6 de diciembre de 1978. Y digo todas las noches, porque en este régimen de caciques, no amanece jamás. Y metodologías aparte, todos los partidos son lo mismo porque todas las universidades son la misma universidad y todos los colegios son el mismo: la misma secta. Casi podríamos decir que todos los niños llevan el mismo uniforme, van al mismo colegio y se llaman de la misma manera. Ésta es la verdadera corrupción: el ánimo de lucro y la picaresca existirán siempre. ¡Ojalá la corrupción fuera solamente eso!