El debate lo abrí yo, por si no te acuerdas.
Vamos a ver: si dices que cada uno tiene su verdad, es imposible construir una sociedad, que es el ejemplo del que estamos hablando- y no de si la tierra es plana o no.
Decías: “A través del relativismo radical se pueden construir sociedades a partir de convenciones, vamos lo que se ha hecho toda la vida de dos. El problema ha surgido cuando dichas sociedades han intentado vender convenciones aceptadas más o menos a la fuerza como verdades absolutas.”
Y yo digo: ¿cómo se pueden llegar a acuerdos cuando se duda de toda verdad? ¿Cómo ponernos de acuerdo en algo que para mí puede ser bueno y para ti malo? Esa convención sería imposible, sí no se parte de una realidad básica, en la que todo el mundo está de acuerdo. El pacto social se hace para proteger unos derechos, pero ¿qué derechos? Según una concepción: los que ya teníamos antes de hacer ese pacto, que actúa como reconocedor de los mismos. Pero para que esos derechos tengan un contenido, creo que hay que establecer que tal o cual cosa es como es y además es necesario protegerla porque pertenece a todo hombre.
Dices que no te fías de la experiencia de los demás, lo que me parece lógico y hasta loable, pero te pregunto: ¿has estado en Groenlandia? Y si no has estado: ¿Cómo sabes que existe? ¿Sólo existirá cuando la veas físicamente tú? ¿O para ti no existe y sí para los que la han visto?
Saludos.
[/quote]
Primero, no creo (aunque pudiera ser porque con la de cosas que he dicho en este debate...) que yo haya afirmado rotunda y categóricamente que cada uno tenga su verdad. Lo que si digo es que no es imposible crear una sociedad a partir de convenciones no basadas en realidades absolutas. ¿Cómo? a través de la fuerza y la imposición. Date un garbeo virtual por la historia de la humanidad y podrás comprobarlo.
No entiendo que hables de "acuerdos", no hace falta que se pongan "de acuerdo" las posturas enfrentadas con que una se imponga a la otra, a ésta última no le queda más que tragar y aceptar.
Podíamos decir que todos los derechos alrededor de los que se crean sociedades parten de uno que, al poder ser matizado no podríamos encuadrar en la categoría de "verdades absolutas" que es el de la supervivencia. La gente en general aceptará aquellas "verdades" que garanticen su supervivencia, la faciliten y mejoren su calidad de vida. Pero no tiene ni que ser así y si no te das otro garbeo virtual por los duros años de la posguerra española.
Por cierto, que Groenlandia exista o deje de existir no es algo, que a priori, influya en mi existencia. De todas formas mi experiencia no se limita a "estar allí". La experiencia, en estos tiempos que corren, se nutre de imágenes en la tele, ordenador, etc. De todas formas, poniéndonos radicales no tengo ningún inconveniente en aceptar que los mapas, internet, etc. no mienten al mostrarme fotos de Groenlandia o señalarme su ubicación (bien podría ser que Groenlandia no existiera y hubiera un complot a nivel mundial urdido por el Dr. No para que todos creyéramos que existe). De todas formas, ya te digo, que hasta la fecha, el hecho en sí de que Groenlandia exista o no, no altera en gran medida mi vida, con lo cual no tengo inconveniente en aceptar que existe. Ahora bien, no porque alguien me diga que Groenlandia es el mejor país del mundo para vivir, voy a coger yo las maletas, vender mi casa, despedirme del trabajo e irme a Groenlandia cagando leches, primero iré yo para comprobar in situ que Groenlandia es El Dorado prometido (vamos, siempre que exista).
[/quote]
Creo que te has contradicho varias veces, pero bueno.
Lo de construir una sociedad a mamporrazos lo llamo imposición, no construcción. Una sociedad que duda de cuanto es dos más dos y admite que para cada uno puede ser una cosa, imagínate cuando se pongan a ver el contenido de un derecho.
Lo de Groenlandia venía por una afirmación anterior tuya, pero era algo puramente teórico, como toda esta discusión.
Es que tú puedes tener o no inconvenientes para aceptar una verdad, pero eso no quita que de suyo exista, ni la verdad lo es en función de tus creencias o preferencias.
Saludos.