¡¡¡Qué vida más triste debe ser aquella que lleva una mujer de avanzada edad, con su marido en el paro, tocándose en casa sus cosas y un hijo en enfermo!!! ¡¡¡Qué vida más triste, pero no por lo que le toca sufrir, sino por no creer y cumplir los preceptos del Señor!!!
porque como dice el Señor, no todo aquel que diga: Señor, Señor, se salvará, porque si llevas en la boca a Dios y no cumples sus preceptos (mandamientos), de poco le servirá...
¡¡¡Qué triste vida lleva la mujer que sólo odio se desprende de su vida!!!
¡¡¡Qué triste es no creer en la Iglesia y perseguirla como lo hace!!!
Salmo 1 - LOS DOS CAMINOS DEL HOMBRE
Dichoso el hombre
que no sigue el consejo de los impíos,
ni entra por la senda de los pecadores,
ni se sienta en la reunión de los cínicos;
sino que su gozo es la ley del Señor,
y medita su ley día y noche.
...pero claro, quién busca aliados entre los enemigos de Dios, que infeliz vida, porque todos sus esfuerzos son en vano...
Salmo 3 - CONFIANZA EN MEDIO DE LA ANGUSTIA.
Señor, cuántos son mis enemigos,
cuántos se levantan contra mí;
cuántos dicen de mí:
«ya no lo protege Dios.»
Pero tú, Señor, eres mi escudo y mi gloria,
tú mantienes alta mi cabeza.
Si grito invocando al Señor,
él me escucha desde su monte santo.
2.- El Evangelio asume el quinto mandamiento, pero va más allá: Habéis oído que se dijo a los antiguos: no matarás, y el que mate será procesado. Pero yo os digo: todo el que esté peleado con su hermano será procesado. Y si uno insulta a su hermano, tendrá que comparecer ante el consejo, y si lo llama renegado, merece la condena del fuego. Por tanto, si cuando vas a poner tu ofrenda sobre el altar, te acuerdas allí mismo de que tu hermano tiene algo contra ti, deja allí tu ofrenda ante el altar y vete primero a reconciliarte con tu hermano, y entonces vuelve a presentar tu ofrenda (Mt 5, 21-24).
¿Te suena de algo SEÑORA? ¿No te conmueve la palabra de Dios? ¿No te anima en esas ansias de justicia y en esos anhelos de persecución contra la Iglesia a perdonar y rezar por quienes pecan?
...Si tu corazón no perdona, tu vida será un fracaso y tu muerte tu destino final...
Fe en Cristo.