¿Y de quién tendríamos que aprender?. Pues, posiblemente, de DINAMARCA:
La educación en Dinamarca es gratuita para todos y de muy alta calidad.
El sistema educativo danés se caracteriza por una serie de principios: hay nueve años de enseñanza obligatoria, pero no existe la escolarización obligatoria; la enseñanza se considera un instrumento de formación que promueve la igualdad, de manera que la escuela pública es una escuela unitaria en la que no se separa a los alumnos en función de, por ejemplo, sus aptitudes o su procedencia social.
Los principales objetivos de la educación danesa son proporcionar una formación oficial, es decir, que dé acceso a determinado tipo de ocupaciones o estudios superiores, al mayor número de personas posible y lograr una mayor coherencia entre el sistema de educación para adultos y el sistema de perfeccionamiento profesional.
Para controlar que se cumplan estos objetivos existe el Instituto Nacional de Evaluación, un organismo autónomo dependiente del Ministerio de Educación cuya misión es realizar el seguimiento y evaluación de todas las áreas educativas con excepción de las denominadas escuelas libres de primaria.
La escuela pública es competencia de los municipios, aunque el Ministerio de Educación fija los objetivos, las áreas de conocimiento y de competencias, y los niveles de exigencia de los exámenes finales; publica planes de estudios orientativos, etc. Los plenos municipales son responsables de la economía y la inspección de las escuelas del municipio. La influencia de los padres en la escuela pública, a la que todas las partes atribuyen un papel decisivo en el rendimiento del alumno, sobre todo en el período de la enseñanza básica, se manifiesta de manera formal a través del consejo escolar, compuesto por entre cinco y siete representantes de los padres, dos de los empleados y dos de los alumnos. El consejo escolar, cuyo período de vigencia es de cuatro años, se encarga de velar por la buena marcha de la escuela, establecer los principios para su funcionamiento y aprobar los presupuestos y el reglamento. Por lo que se refiere a la enseñanza secundaria, su dirección es responsabilidad de las provincias, mientras que la supervisión de los contenidos educativos y la realización del examen de reválida quedan en manos del Ministerio de Educación. En cuanto a los estudios superiores, cada centro determina, con la participación de alumnos, etc., el plan de estudios de cada carrera dentro de los marcos establecidos por el Ministerio de Educación o por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, responsable de los estudios superiores de larga duración.
Casi todos los alumnos se integran al sistema educativo después de un año de educación preescolar de carácter voluntario para niños de entre cinco y seis años de edad antes de incorporarse al primer curso de la escuela primaria.
Algunos de los principios fundamentales de la enseñanza en la escuela pública son la diferenciación educativa, que implica tomar las aptitudes de cada alumno como punto de partida para el planteamiento de la enseñanza, la evaluación interna continua y la participación del alumnado; esta participación también se pone en práctica a través de los consejos de alumnos que, en escuelas con cursos superiores al cuarto nivel, tienen carácter obligatorio. Los escolares pueden pasar su tiempo libre antes y después del horario de clase en centros de recreo escolar municipales.
La Universidad
La edad promedio de ingreso a la universidad en Dinamarca es de 22 años. Esto se debe a que es común que los jóvenes daneses viajen o trabajen en etapas tempranas de su edad adulta, y tomen una decisión formal acerca de sus estudios universitarios contando ya con más edad y experiencia.
Las universidades comúnmente no tienen dormitorios, pero la mayoría de sus estudiantes viven ya fuera del hogar paterno, por su propia cuenta, normalmente alquilando apartamentos junto a otros jóvenes, o habitaciones dentro de casas más grandes. El sistema social del país, sin embargo, es extremadamente solvente y apoya a los jóvenes universitarios con 5200 coronas danesas mensuales (2009), lo cual equivale a unos 1.047 dólares estadounidenses o 700 euros. La educación es gratuita, por lo que muchos daneses tienen acceso a una educación superior.
Las 130 instituciones de educación superior danesas ofrecen cursos y programas de estudios de diferente duración y niveles.
Existen 5 universidades que ofrecen los estudios universitarios tradicionales. Por otra parte otras diez universidades especializadas en materias como ingeniería, veterinaria, farmacia, arte, arquitectura y estudios comerciales, además de dos academias de música, conceden titulaciones basadas en la investigación, tanto a nivel elemental como superior.
Existen otras 100 escuelas superiores que ofrecen formación de ciclo más corto y medio en disciplinas como formación de maestros, labor social, fisioterapia, enfermería, ingeniería, diseño, música, etc. La mayoría de ellos son instituciones financiadas y controladas por el Estado, sólo algunas de ellas son de carácter privado.
Los títulos que se pueden obtener son: Un Bachelor o Licenciatura de tres años de duración al que sigue normalmente un periodo de otros dos años de especialización para obtener el Candidatus (Master), que requiere la realización de una tesis. Tres años más de estudios de post graduación tras la obtención del título de Candidatus, conducen a un doctorado (Ph.D), que hoy en día es posible realizar en inglés.
El año académico se divide en dos partes: el semestre de otoño, de agosto/septiembre hasta finales de diciembre, y el semestre de primavera, de enero/febrero a mayo/junio. Tanto diciembre/enero como mayo/junio son meses de exámenes finales donde los alumnos no reciben clases, sino que se dedican a estudiar para los exámenes.
Los exámenes en las universidades suelen ser muy exigentes, ya que el contenido incluye todos los temas que se ha visto durante el semestre y el pensum se basa exclusivamente en textos o lo que equivale a un libro entero. Lograr una vista general y tener la capacidad de analizar y perspectivar los temas es crucial para ganar con una buena nota, ya sea examen oral o escrito. Todo el semestre depende de un solo examen final por cada curso, así que no se puede juntar puntos durante el semestre al entregar trabajos y tomar pruebas parciales como en otros sistemas universitarios. El examen final es crucial.
No es obligación ir a clases durante un semestre y no se toma asistencia, pero es muy recomendable asistir a las clases, ya que el profesor es un guía importante para entender los textos leídos y lograr la vista general que se requiere para el examen. La lengua de enseñanza es normalmente el danés. Sin embargo, cada vez más instituciones ofrecen parte de sus cursos regulares en inglés o en otros idiomas, aunque existen fórmulas especiales para extranjeros, a excepción del doctorado, es necesario tener algún conocimiento del danés para evitarse cualquier problema.
Los estudiantes daneses reciben un salario del estado llamado Statens Uddannelsesstøtte (Ayudas Estatales a la Educación). Aproximadamente 5200 coronas danesas (700 euros) al mes reciben después de cumplir los 18 años. Esto asegura que puedan concentrarse en sus estudios en lugar de tener que ir a trabajar para mantenerse. También es para que no dependan económicamente de los padres. Sin embargo, la mayoría de los jóvenes daneses tienen un trabajo que es relevante para sus estudios.
CONSECUENCIAS:
El Índice de Prosperidad del Instituto Legatum 2009, ubica a Dinamarca como uno de los mejores países del mundo para vivir, compartiendo la primera posición con Finlandia, Suiza y Suecia. El índice se basa en una definición de prosperidad que combina crecimiento económico con el nivel de libertades personales y democracia en un país, así como mediciones de felicidad y calidad de vida.
Los daneses son la población más felíz y satisfecha del mundo, según la anual y científica Encuesta Valores Mundiales y World Database of Happiness.[2] Esto se debe entre otras cosas a su democracia, su igualdad social, su atmósfera pacífica, la solidaridad y alta calidad de vida.
Dinamarca tiene los salarios más altos del mundo, según un estudio publicado por UBS AG (antigua Unión de Bancos Suizos) en el 2009.
Dinamarca además tiene el nivel más grande de igualdad de ingresos del mundo.
Dinamarca posee los impuestos mas elevados del planeta, pagando mas del 60% de impuesto por salario.
Dinamarca se encuentra entre los 3 países más ricos del mundo, con Noruega e Islandia.
Según el Índice de Paz Global 2009, Dinamarca es el segundo país más pacífico del mundo, sólo sobrepasada por Nueva Zelanda.
Dinamarca fue clasificado el país menos corrupto del mundo en el año 2008, según Corruption Perceptions Index.
Dinamarca tiene el mejor clima para hacer negocios en el mundo, según la revista de negocios Forbes, 2009.
En 2008, la revista Monocle catalogó la capital de Dinamarca Copenhague como la mejor ciudad del mundo para vivir en su Top 20 World's Most Livable Cities Chart. Adicionalmente, fue clasificada como una Ciudad Cultural Global (GaWC), siendo tercera en Europa occidental, en rivalidad con otras ciudades con sedes centrales o centros de distribución, sólo sobrepasada por Londres y París.
La moderna economía de Dinamarca permite que exista una agricultura de alta tecnología, unos altos]] niveles de bienestar, una moneda estable y una alta dependencia de los mercados exteriores. Dinamarca es un exportador neto de productos alimenticios y energía y tienen una balanza de pagos positiva.
Un 75% de los trabajadores daneses pertenece a algún sindicato dentro de la Confederación Danesa de Sindicatos. Las relaciones entre los sindicatos y la patronal son de cooperación. Los convenios laborales que fijan los horarios de trabajo y los salarios se negocian entre la patronal y los sindicatos, con una mínima implicación del gobierno.
El gobierno ha sido capaz de igualar o superar los criterios económicos de convergencia necesarios para entrar en la unión económica y monetaria de la Unión Europea. Sin embargo, Dinamarca, en un referéndum realizado en septiembre de 2000, decidió no adoptar el euro como moneda.
Algunos de los valores más importantes en la cultura danesa son, entre otros, la empatía, la solidaridad, la confianza entre las personas, la tolerancia, la libertad, la igualdad y la justicia. Siguen al pie de la letra sus leyes y su constitución. En general, es gente muy educada y amable.
Los daneses tienen una actitud muy relajada y alegre frente a la vida lo cual se refleja en su trato social que suele ser muy informal. Son tolerantes, pacíficos, de mentalidad abierta y sin ningún tabú. La sinceridad es importante para los daneses que son francos y que no ocultan sus opiniones críticas. El humor danés es irónico, sarcástico e informal y se utiliza con frecuencia en cualquier tipo de conversación como una forma de mostrar confianza. No es una puerta abierta para ofender o faltar el respeto. Es casi imposible ofender a un danés. Sin embargo, para algunas culturas puede ser difícil interpretar el humor y sarcasmo danés. La actitud relajada de los daneses además se refleja en los muchos ambientes alternativos que tiene Dinamarca y que son una parte fascinante y exuberante del país. Los daneses son muy dispuestos a demostrar la cultura que tienen y orgullosos de su historia, siempre poniendo de frente su bandera, su reina, y su moneda (la corona danesa).
La gente de la península Jutlandia, se caracteriza por ser granjeros y por costumbres más arraigadas y tradicionales. Es famosa por su actitud modesta y humilde. La población de la isla Fionia, son gente dedicada a la agricultura, su manera de hablar es conocida por muchos como 'cantada', viven en una isla pequeña lo que los hace llegar a la capital Odense en 30 minutos aproximadamente. Fionia es llamado "La isla de la sonrisa" por la amabilidad y constante sonrisa de su gente. En la isla más grande e importante llamado Selandia, donde además se encuentra la capital Copenhague, la gente trabaja mayormente en la industria y sector servicios.
El país más feliz del mundo
Según la Encuesta Valores Mundiales y World Database of Happiness, los daneses son la población más feliz y satisfecha del mundo (2006-2008). Esto se debe entre otras cosas a su democracia, su igualdad social, su atmósfera pacífica, la solidaridad y alta calidad de vida.