Sigo, he dado al botón equivocado.
Obra, la de De Quincey, bastante antigua, evidentemente.
La idea de "matar a un republicano" no es comparable, porque no hablamos de "matar a un católico". Efectivamente, las obras que puedan incitar a la violencia por razón de ideología, sexo o raza me parecerían fascistoides y altamente peligrosas.
La otra, pues qué quieres que te diga. El catolicismo colaboró con la dictadura de Franco, la religión era obligatoria en las escuelas, yo la sufrí, y todavía hay que darla ("optativamente" en Bachilerato, menuda risa, si no es enseñanza obligatoria, pero allí está, y con el beneplácito de la Iglesia, claro), y la Iglesia ha hecho barbaridades a lo largo de los siglos, pero, cómo se va a arrepentir de ello, si es una contradictio in terminis dada la infalibilidad del Papa.
Así que, mira, de degradación moral nada. Quien muestra una enorme degradación moral es quien pretende imponer sus ideas, se opone a la educación sexual en las escuelas porque considera que es un secreto de Estado, o se opone al divorico en algunos países, mismamente Irlanda.
No sé si lo conté alguna vez. Hace años fue a visitar el Vaticano y, en la cola, delante de mí, había unos argentinos, paredes, hija de unos doce años, hijo de uno 17. El tipejo que controlaba la cola, camisa blanca de manga larga en pleno verano, muy bien peinado, limpísimo, pretendía que la niña no podía pasar porque su falda no llegaba a las rodillas. Intentó sugerir que le estirarán la falda para abajo, él mismo estiraba, lo cual era por supuesto bastante peor. Bueno. Yo horrorizado.
Sólo una mente pervertida (y perversa) puede pensar que una niña de 12 años es fuente de "deseos impuros", en fin, qué gente más extraña tenéis allí dentro.
El arte es el arte, déjalo estar. En cuanto a la degradación moral, sí, hay mucha. Pero no es el caso de la obra que comentas. Sólo quiere provocar, no incitar a matar a ningún cura.