Capillitas no es un insulto, es una forma de llamar por aquí a la gente que está muy metida en el ámbito de las hermandades.
Sinceramente ese argumento es muy pobre. El ayuntamiento está en su derecho de recortar donde vea. Qué pasa, ¿la austeridad no puede tocar la Semana Santa como sea?
Viva el vino, ¿no es así?
Mira, yo he vivido mucho tiempo en Cádiz y sinceramente, aquí hay problemas estructurales y da mucho que pensar que la preocupación principal sea si la Hermandad va a recibir los 120.000 euros del Ayuntamiento o no. Que para lo que nos interesa las partidas son superfluas, y para otras cosas aplicamos el capitalismo de amiguetes. Si no hay subvenciones para emprendedores, ¿por qué darlas a pasos? ¿No se supone que se autofinancian con el dinero de los feligreses?
Dicho sea de paso, coincido que políticamente no es la medida electoralmente más conveniente, ¿pero no se supone que te eligen para aplicar un programa y no para impulsar ideas electoralistas?
O se es "rojo" o no se es. No puedes reprocharle a un pez que no pueda trepar un árbol.
Como dijo Jack, por partes:
"Capillitas" es una falta de respeto (si quieres llamarlo insulto, “pó” vale), pero para mí lo es. Si no lo has dicho con esa intención, bueno, pues en tu caso no hay nada más que hablar al respecto, sin embargo estarás conmigo que la mayoría lo utiliza con tono despectivo.
El argumento no es ni pobre ni rico, tan sólo quise utilizar tu mismo argumento aplicado precisamente a su ámbito, las chirigotas. Recortar de los “capillitas” es el “chocolate de loro” y ni eso. No es que sea una medida inconveniente desde un punto de vista de rédito electoral, sencillamente es económicamente torpe, vamos una “tontería contemporánea”, una ocurrencia de alto nivel.
De todas formas me he propuesto “adecuar” el nivel, de ahí la pobreza argumental.

Ojalá fuese “rojo”, sencillamente no es nada, a nivel político, sencillamente nada. ¡¡¡Joder!!! ¿es eso ser “rojo”?
P.S. Sí, tienes razón, pero te falta el final... el vino... y las mujeres
