Lo que es perfectamente entendible es que una persona a la que le han asesinado a alguien quiera y sienta que necesita venganza, y no justicia, que aunque a veces se confunda, no es lo mismo. Y eso es perfectamente entendible desde un punto de vista humano. Lo que no lo es tanto es que un partido político vaya a esa persona y aproveche ese natural afán de venganza para utilizarlo políticamente contra el Gobierno. Y que además le convenza de que como es víctima está mas legitimado que nadie para decidir qué es lo mejor para luchar contra el terrorismo. ¿Nos parecería lógico que las víctimas de cualesquiera otros delitos fueran quienes establecieran la legislación y la política penitenciaria del País? ¿Entonces, por qué dais por sentado que la solución al terrorismo debe pasar necesariamente por acatar la voluntad de las víctimas ( y hablo de las víctimas no como colectivo, sino como personas, porque el presunto "coletivo" no es represtentativo más que de unos pocos)?
Saludos
Hola Gem-Mas,
Citas mi mensaje como si respondieras a él, pero yo realmente no veo relación entre tu reflexión y la mía, me parecen paralelas.
En ningún momento he “dado por sentado que la solución al terrorismo debe pasar necesariamente por acatar la voluntad de las víctimas”, y no creo que de mi opinión se pueda deducir tal cosa.
Lo único que he dicho es que las víctimas quieren justicia, y si para obtenerla no tienen más remedio que intentar influir en política, pues eso harán, me parece lógico y legítimo.
En cuanto a los partidos, ya he dicho muchas veces que no creo en partidos sino en personas. En todos los partidos hay personas y personas. Y lo que no hay que olvidar nunca es que muchos de los políticos que se manifiestan junto a las víctimas, también son víctimas antes que políticos. Y como víctimas que son, las respeto, independientemente del partido al que pertenezcan. Los políticos demócratas de Vascongadas, que se juegan la vida a diario por defender la libertad, tienen toda mi admiración y toda la legitimidad como para salir a la calle junto a las víctimas a pedir justicia. Y cualquier persona con dos dedos de frente y algo de vergüenza, no se atrevería a criticar su actitud o su actuación, cómodamente tumbada en el sofá de su casa. Si se atreve a soltar “si yo fuera él haría esto y no lo otro” pues que lo demuestre, si lo ve tan fácil. Que se vaya a vivir entre amenazas de muerte diarias, con miedo constante a que lo maten a él o a cualquiera de sus seres queridos y luego se atreva a criticar. Y no lo digo por ti en absoluto.
Como te digo, no entiendo bien dónde enlazas tu respuesta a la mía, tengo la sensación que aún citando mi mensaje, contestas a lo que yo no he dicho.
Un saludo.