Aunque era antiespañol y protegiera a los etarras de la justicia española, lamento su muerte y lamento cómo se ha producido. La industria de la muerte, de Cuba y Estados Unidos lo ha matado de una forma horrible. Lo compadezco. Podía haberse salvado si no se hubiera puesto en manos de Cuba y Estados Unidos.
¡Cómo aborrezco a esa industria de la muerte! ¡¡Abajo los torturadores tanto cubanos, como europeos, chinos y estadounidenses! Espero que América se libere de ese yugo repugnante que son los norteamericanos y sus monopolios, sus industrias de la muerte.
¡¡Abajo toda esa grentuza!! Los Estados Unidos por encabezar la industria de la muerte y los demás por seguirlos.